DESIGUAL RECEPCION MUNDIAL DE LA SEGUNDA ENTREGA DE "WICKED" EN TAQUILLA.

 DESIGUAL RECEPCION MUNDIAL DE LA SEGUNDA ENTREGA DE "WICKED" EN TAQUILLA.

Resulta llamativo observar cómo, en un mismo fin de semana, conviven ascensos espectaculares y caídas dolorosas. Entre los tropiezos más sonados destaca Todos los lados de la cama, cuyo pobre recorrido confirma el difícil momento que atraviesa Telecinco Cinema. En paralelo, Los domingos continúa creciendo de manera paciente pero constante, superando ya los tres millones y aguardando con serenidad —y cierta expectación— la llegada de los Goya.

En el ámbito internacional, el caso más comentado ha sido el débil estreno de Scarlet en Japón: la nueva obra de Mamoru Hosoda no ha logrado siquiera alcanzar el millón y medio de dólares en casa, un dato sorprendente para un cineasta habitualmente infalible en su mercado.

También han dejado señales preocupantes los desplomes consecutivos de Keeper y Christy, cada uno hundiéndose en su segundo fin de semana con una rapidez que recuerda lo frágil que puede ser cualquier campaña cuando el boca a oreja no acompaña. En contraste, Valor sentimental continúa reforzando su posición de cara a la temporada de premios, consolidándose poco a poco como uno de los títulos que podrían resistir mejor el paso de las semanas.

Mientras tanto, las superproducciones tampoco viven un momento especialmente homogéneo. Ahora me ves 3 ha encontrado en el mercado internacional un refugio más amable, superando ya los 100 millones fuera de Estados Unidos y avanzando a buen ritmo para sobrepasar en breve los registros de Predator: Badlands. Sin embargo, sus cifras en territorio norteamericano se resisten a despegar, y no parece probable que termine superando la barrera simbólica de los 100 millones domésticos ni los 200 globales que se le exigirían a cualquier gran proyecto de Disney por encima de ese presupuesto.

Algo similar ocurre con The Running Man, otro título que no logra imponerse en un panorama más competitivo de lo que parecía sobre el papel. Al lado de estas propuestas de gran escala, sorprende lo discretas pero dignas que resultan las cifras de Rental Family (Familia de alquiler) y Sisu: Camino a la venganza. Con estrenos modestos —1.925 y 2.222 salas—, ambas han cumplido con lo esperado para producciones económicas cuyo verdadero rendimiento se jugará en plataformas y formatos domésticos.

Y, por encima de todo este mosaico, asoma el triunfo incontestable de Wicked: Parte dos. Su impacto en el mundo anglosajón ha sido, como se preveía, fulminante. Eso sí, la respuesta en el resto del planeta ha sido bastante más tibia, aportando apenas un cuarto de su recaudación total. Un recordatorio de que incluso los grandes fenómenos tienen límites cuando salen de su zona natural de influencia.