GRAFTED (2024)

 EL 👀CRITICO

GRAFTED (2024)

REPARTO: JOYENA SUN, JESS HONG, EDEN HART, JARED TURNER, SEPI TO’A, MARK MITCHINSON, XIAO HU, BENJAMIN HUDSON, GIDEON SMITH, ALISON QUIGAN, CHLOE PARKER, GINETTE McDONALD, ANDREW MUNRO

DIRECTORA: SASHA RAINBOW

MÚSICA: LACHLAN ANDERSON

PRODUCTORA: SHUDDER

DURACIÓN: 96 min.

PAÍS: NUEVA ZELANDA

Grafted (2024) representa el debut directorial de Sasha Rainbow, quien realiza su primera incursión en el formato de largometraje, el cual, curiosamente, presenta notables similitudes con una película del año anterior, titulada La Sustancia. Esta obra cinematográfica aún no ha sido estrenada en las salas de cine de nuestro país y ha estado disponible únicamente en el Festival de Sitges.

De manera interesante, la película comparte ciertos elementos en común con La Sustancia. En ambas, se presentan personajes femeninos principales que experimentan insatisfacción con sus cuerpos y deciden someterse a un proceso de transformación, a pesar de que este puede resultar profundamente perturbador con el fin de alinearse con el estándar femenino que la sociedad considera "adecuado". En ambas narrativas, se recurre a un Body Horror grotesco, en el que se entrelazan temáticas de desfiguración, carne y repulsión (se recomienda precaución a quienes no son aficionados a este tipo de terror). Sin embargo, a diferencia de La Sustancia, que contaba con recursos formales interesantes, esta cinta ofrece una producción visual más modesta, lo cual es comprensible.

No obstante, a diferencia de la película que fue nominada a los Oscars, Grafted parece carecer de una claridad en su mensaje final, el cual se torna confuso debido a múltiples giros y altibajos en la narrativa. En ciertos momentos, la película resulta incluso absurda, exigiendo del espectador un considerable esfuerzo de suspensión de la incredulidad para aceptar la evolución de la protagonista y el contexto en el que tiene lugar la acción (por ejemplo, la dinámica entre el profesor y la estudiante carece de lógica, evidenciando que el personaje masculino ha sido forzado a encajar para justificar dos subtramas dentro de una; la del profesor abusador y el investigador que se apropia del proyecto).

La película alcanza sus mejores momentos cuando aborda el juego de las suplantaciones de identidad que va en aumento, mientras que la primera mitad de la obra es notablemente predecible. La actuación de Eden Hart, quien asume el rol de co-protagonista en un determinado momento de la película, contribuye significativamente, presentando destacadas escenas de histrionismo. Esta parte de la película es, sin duda, un gran acierto.