CAILEE SPAENY Y DREW STARKEY AL FRENTE DEL REPARTO DE "DEEP CUTS".
La adaptación cinematográfica de Deep Cuts, la celebrada primera novela de Holly Brickley, avanza con un giro notable en su reparto. Lo que iba a ser un proyecto encabezado por Saoirse Ronan y Austin Butler ha encontrado nuevos protagonistas tras los inevitables conflictos de agenda que apartaron a ambos intérpretes. En su lugar, Cailee Spaeny y Drew Starkey asumirán los papeles centrales de esta historia marcada por la pasión musical y la búsqueda de identidad.
El proyecto se encuentra en manos de Sean Durkin, cineasta que ha consolidado un sello propio gracias a títulos como The Nest, El clan de hierro o su trabajo en varios episodios de Inseparables. Durkin no solo dirige, sino que firma el guion y produce junto a un equipo de nombres muy afines a la sensibilidad de A24: Ronald Bronstein, Eli Bush, Josh Safdie, Anthony Katagas y Jordan Tappis. La combinación anuncia un drama íntimo, estilizado y con el inconfundible pulso emocional que caracteriza al estudio.
En su planteamiento, Deep Cuts se sitúa en los primeros años del siglo XXI para narrar la relación de dos veinteañeros unidos por su devoción absoluta a la música. Su trayectoria conjunta —según la sinopsis oficial— se desarrolla entre las tensiones de la ambición, el anhelo de pertenecer a algo más grande y las turbulencias propias de la entrada en la adultez, todo ello en el marco de una década que marcó a toda una generación.
El fichaje de Spaeny llega en un momento particularmente fértil para su carrera. Tras consolidarse con títulos tan variados como Malos tiempos en El Royale, Jóvenes y brujas, Priscilla, Civil War o Alien: Romulus, la actriz se encuentra actualmente en cartel con Puñales por la espalda: De entre los muertos, la tercera entrega de la saga estrenada hace apenas unos días. En paralelo, Starkey continúa afianzándose como rostro emergente tras su participación en Queer, la adaptación de William S. Burroughs liderada por Daniel Craig y producida también por A24.
Con nuevos nombres al frente y un equipo creativo en plena sintonía, Deep Cuts se perfila como un retrato generacional donde la música no solo acompaña, sino que define el latido emocional de sus protagonistas. Queda ahora esperar a que Durkin transforme la novela de Brickley en un filme capaz de capturar las heridas, deseos y contradicciones de una generación en formación.

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