CHRISTIAN BALE Y LEONARDO DICAPRIO POSIBLES PROTAGONISTAS DE "HEAT 2".

 CHRISTIAN BALE Y LEONARDO DICAPRIO POSIBLES PROTAGONISTAS DE "HEAT 2".

Antes de que se confirme quién dará vida a los nuevos ejes de Heat 2, la industria se agita con un rumor que finalmente ha tomado forma: Leonardo DiCaprio y Christian Bale están en el punto de mira de Michael Mann. Deadline ha revelado que ambos actores están siendo tanteados para protagonizar la secuela del célebre thriller de 1995, aunque se desconoce aún qué personajes podrían encarnar.

Ese secretismo contrasta con la solidez del proyecto, que renace bajo el paraguas de United Artists, relanzada por Amazon MGM Studios tras la llegada de Scott Stuber —antiguo presidente de Netflix Films— a la compañía en 2024. Con Jerry Bruckheimer, Nick Nesbitt y el propio Mann en la producción, la película avanza con una estructura industrial distinta a la de su antecesora, que pertenecía a Warner Bros., pero con la misma voluntad de preservar la intensidad del universo que Mann creó hace ya tres décadas.

A diferencia del film original, la secuela no parte de un guion escrito desde cero, sino de la primera novela del propio director, elaborada junto a la autora Meg Gardiner. El libro propone una narrativa expandida que viaja hacia atrás y hacia adelante en el tiempo para explorar los años previos y posteriores al enfrentamiento final entre Vincent Hanna y Neil McCauley.

En esta reconstrucción, dos líneas temporales se entrelazan: por un lado, la huida desesperada de Chris Shiherlis, el único hombre del equipo de McCauley que sigue con vida tras aquella persecución nocturna en el aeropuerto de Los Ángeles. Herido y tambaleante, intenta refugiarse en Koreatown solo un día después de perder a su mentor, mientras Hanna —implacable y todavía cargado por la tensión del duelo con McCauley— pisa su rastro decidido a capturarlo antes de que se desvanezca en la ciudad.

Por otro, la narración retrocede a 1988, cuando McCauley, Shiherlis y el resto de la banda continúan con una cadena de golpes que los lleva por la Costa Oeste, la frontera con México y finalmente Chicago. Es una época de libertad feroz, dinero rápido y una camaradería que contrasta con la desolación futura que el espectador ya conoce.

Con estas dos líneas confluyendo en un mismo vértigo emocional, Heat 2 se perfila como un puente entre leyenda y reinvención. Falta por saber si DiCaprio y Bale se sumarán a este nuevo capítulo, pero la maquinaria ya está en marcha, sostenida por una mitología que Mann sigue expandiendo con la precisión obsesiva que siempre ha caracterizado su cine.