MICHAEL J. FOX HABLA SOBRE COMO LE GUSTARÍA QUE FUERA SU MUERTE.

 MICHAEL J. FOX HABLA SOBRE COMO LE GUSTARÍA QUE FUERA SU MUERTE.

Hay rostros que parecen hechos para quedarse en la memoria colectiva, como si el paso del tiempo no lograra borrarlos. Michael J. Fox pertenece a esa estirpe. El joven carismático que recorrió el tiempo en un DeLorean se transformó, con los años, en algo más grande que su propio mito: un símbolo de resistencia y dignidad frente a la fragilidad humana.

Desde que en 1991 le diagnosticaran la enfermedad de Parkinson —cuando apenas tenía veintinueve años—, Fox ha desafiado con serenidad una batalla que lleva más de tres décadas librando. En una conversación reciente con The Times, el actor reflexionaba sobre el largo camino recorrido. “Es mucho más misterioso y enigmático”, confesaba, consciente de que pocos han convivido con el párkinson durante tanto tiempo. No lo decía desde la autocompasión, sino con la calma de quien ha aprendido a mirar de frente lo inevitable.

Nunca le ha interesado despertar lástima. En su discurso hay una lucidez sin dramatismos, una aceptación casi luminosa. “Me gustaría no despertarme un día. Eso estaría muy guay”, decía entre risas contenidas, explicando que su único deseo es que el final llegue sin dolor, sin tropezones ni tragedias. “No quiero que sea algo dramático”.

Su enfermedad no logró arrebatarle el impulso creativo ni la conexión con el público. Aunque en 2020 anunció su retiro del cine, Fox volverá a la pantalla junto a Harrison Ford en la próxima temporada de Terapia sin filtro, la serie creada por Jason Segel que combina humor y emoción con una naturalidad poco común. Fue un médico quien lo convenció de seguir actuando: “Me dijo que podía ayudarme con los síntomas… y así fue, hasta cierto punto. El punto en el que empiezo a romper cosas”, bromeaba.

Entre golpes, caídas y desafíos, Fox ha aprendido a integrar el desorden en su vida cotidiana. “Puedo caminar, pero no veo bien. Puede ser peligroso. Así que lo asumo y sigo adelante”, contaba. Y aunque reconoce sin eufemismos que “la enfermedad es una mierda”, se muestra agradecido. “La gente no me ve como alguien patético. No sé cómo me ven exactamente, pero me da la sensación de que me consideran una influencia positiva.”

Con su inquebrantable sentido del humor y una honestidad que desarma, Michael J. Fox ha demostrado que hay héroes que no necesitan viajar en el tiempo para dejarnos una lección de eternidad.



Comentarios

  1. El tema de la muerte es un tema tabú que da mal rollo, pero cuando se convive con la enfermedad y mas desde hace 35 años como él, pienso que quieras o no quieras debes pensar y a menudo.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario